Tauromaquia
La generosidad… del consistorio briocense
…al adjudicar, a dedo, el festejo de primavera de este año 2023; lo cual llama mucho más la atención. Porque si todos los políticos, con el dinero y la buena reputación festiva de sus localidades, deben cogérsela siempre con papel de fumar. Ni les digo y cuento, cuando las elecciones están a la vuelta de la esquina. ¡Señor, Señor…!
Incredulidad, es la sensación que ha producido, en los aficionados, esta adjudicación a Funtausa, responsable del esperpéntico ferial capitalino del pasado año 2022, que dejó al consistorio del PSOE, al pie de los caballos, con un mayo de elecciones en lontananza... Gran mérito empresarial que el ayuntamiento de Brihuega, de idéntica siglas políticas, da por bueno y la adjudica sin anuncio de licitación. O sea, para más que hacérselo mirar… ya que evitaron el concurso de ofertas. Por tanto, no pudo haber comparación, y esta circunstancia, crea palmaria sospecha. Nadie lo puede entender.
El resultado ha sido el fácilmente previsible, en cuanto a la configuración del cartel, pues no es de ocultar que la adjudicataria tiene varias ganaderías de bravo y apodera a varios profesionales. Todo ello conlleva la tentación de dar un festejo, próximo a la alegoría del popular Juan Palomo: yo me lo guiso y… sin mayor problema: Castella, Manzanares, asiduo de La Muralla y ambos, con igual apoderado, junto a Roca Rey. ¡Ah! Y… ¿los toros? pues, de los Matillas y así…casi todo queda en casa. Y eso ya, mola mucho más.
Pero, por la afición, se tenía la esperanza de que esto no ocurriera, porque es recordada la expectación que el pasado año creó el mano a mano de dos toreros que iban a debutar en La Muralla: Diego Urdiales y Ginés Marín; después de la ausencia de Morante y Emilio de Justo, por varias razones justificadas. La sorpresa, vino de la mano del público, que adquirió los 3/4 del aforo, en una tarde lluviosa y esaboría…y que no devolvió ni un boleto, por los cambios habidos. Hasta que se acordó la suspensión por lluvia.
Por ello, si la sensibilidad imperase sobre el maldito parné, en el mundo taurino, nada hubiera impedido el poder responder a esta expectativa frustrada, formando una terna con Manzanares. Se habría logrado un cartel para aficionados y curiosos…pero no. Ya solo se busca el asegurarse el completo aforo y la máxima recaudación. Por tanto, se publicita el regreso, con la incógnita taurina del francés Castella, y se repite al peruano; que ya vimos en 2021. Ambos con un estilo artístico parecido y de escasa diferencia en su concepto. Funtausa, seguro sabe muy bien, que ante el posible escaso diferencial de aforo, entre los dos carteles, realizando un racional análisis de los costos…es que…a mi entender…pues eso…más claro ya, imposible.
También, se ha presentado el evento al estilo más moderno…o sea, sin precios; pero con la posibilidad de compra online de las entradas, que las encarece en un 10%, hasta que se abran las taquillas, dentro de algo más de un mes. Y vamos a llevarnos bien…porque este recargo no existía antes; cuando se adquirían por vía internet. Menos mal que el consistorio, sabedor de lo ocurrido el 2022, con Funtausa en Guadalajara, exigió que los precios sean en Brihuega, los del año pasado. Tampoco nada se dice del envío gratis de entradas al comprador; algo que era muy bien acogido por el personal. Pero afinó otra vez de nuevo, sus cuentas, la empresa y…como que no.
De lo expuesto, se deduce una serie de cambios, que afectan al público y al aficionado, respecto a celebraciones inmediatas pasadas, con quienes, solo por pasarse por taquilla, deben ser respetados. Y en este caso, los cambios son por causa de la aplicación de un criterio de adjudicación, en el logro de no se sabe, con certeza cual, es su fin… una vez analizado lo ya expuesto.
Y ya, para rematar el tema, el cartel que se anuncia, ha sido mejorado en años anteriores con toreros de más atractivo taurino, como el mencionado de 2022, con ganadería de El Torero, que luego se lidió en la plaza de Burgos de 2ª categoría. O, el mismo cartel de 2021, con Emilio de Justo, Juan Ortega y Roca Rey, con garcigrandes. Por eso, los criterios de valoración de las adjudicaciones municipales, no deben ser ocultos, por higiene democrática. Para, sobre todo…evitar los malos pensamientos.
Todavía queda mucho trecho hasta la festividad de San Telmo, patrono de los marineros. Día en que Brihuega acogerá el interés taurino de la jornada. Esperaremos a ver qué tal las ferias de Magdalena y de las Fallas, así como los muy importantes festejos de Semana Santa, para asegurar la entrada, sin recargo…y el cartel definitivo. Si bien, esperamos y deseamos, que todos los que se la juegan, arriben a buen puerto a lo largo del 2023.