El primer partido de la segunda vuelta de la liga BAUHAUS ASOBAL comenzó con la intensidad del balonmano del bueno. El espectacular anillo de honor formado por más de 300 niños y niñas motivó al máximo a los catorce hombres que saltaron al parqué del David Santamaría.
A la tercera va la vencida, dicen. Y en el caso del BM Guadalajara en esta pretemporada de invierno, así ha sido: tres amistosos ha necesitado el equipo de César Montes para que encajaran las piezas después de las Navidades y los esfuerzos se plasmaran en forma de victoria. Ya sabemos que en un amistoso el resultado es lo de menos, pero a nadie le amarga a un dulce, y menos cuando se trata de ganar al Globalcaja Ciudad Encantada de Cuenca.
Con la lección aprendida y las cosas claras salió el BM Guadalajara al parqué del David Santamaría. Tras la derrota ante Villa de Aranda, eran muchos los aspectos que debía mejorar, tanto a nivel colectivo como individual. César Montes empleó las sesiones de entrenamiento de jueves y viernes para enmendar los errores y proponer soluciones que devolvieran al conjunto morado su capacidad goleadora y su fortaleza defensiva.
Hombrados faltó a la cita, lo que dio una grandísima oportunidad a Adrián Eceolaza, quien hizo una primera parte sobresaliente, con paradas de infarto que levantaron los aplausos del público. Montoya, quien por motivos personales tampoco pudo estar dio un protagonismo especial a Nico López, quien se vio con su ex compañero de posición, José Manuel Ramos Padilla, recién fichado por el Aranda.
La primera semana de entrenamientos del BM Guadalajara ha pasado a toda velocidad. Los jugadores siguen con su puesta a punto, combinando carrera en las pistas de atletismo de La Fuente de La Niña con trabajo de fuerza en el gimnasio y sesiones de técnica y táctica sobre el parqué. Cada gota de sudor invertida en esta pretemporada de invierno se amortizará con creces cuando comience la segunda vuelta de la liga BAUHAUS ASOBAL.