Ya la cincuentena le sobrepasa a este paisano de aspecto bonachón, gafas de pasta y ropa deportiva con cierto parecido a aquél curilla que daba formación deportiva en los Maristas o Salesianos. Eran buenos los últimos años de los 70 para el deporte. Muchos jóvenes arriacenses empezaron a hacerse notar en los sectores escolares nacionales; algunos como el baloncesto y el balonmano cobraban notoriedad y se convertían en los embriones de los grandes clubes que ha tenido Guadalajara.
De Salesianos, Maristas y Maestría surgieron el Club Balonmano Guadalajara o el Zoyka, más tarde Club Baloncesto Guadalajara que llegaron a alcanzar la gloria de competir en las máximas divisiones de sus respectivos deportes.
Luque no era el más brillante deportivamente pero amaba al deporte más que todos los jugadores juntos. No se despegaba ni con agua caliente brindándose a ayudar en lo posible; así hacía equipo y se sentía equipo...
Bajo el cartel de celebración en el hall del San José nos recibe Alfonso; “25 aniversario... Hola Luque. Ponen 25 pero tu llevas más... se han equivocado”
“Sí, pero esto no es para mí, es para el poli.... Ja , ja” - sonríe con ese tono grave, tímido y amable que siempre usa. Lo tuyo es desde el colegio; siempre es deporte? “Pues sí, prácticamente. Desde el colegio hasta ahora fíjate si ha llovido“. Lo que que pasa es que rara vez te hemos visto de jugador, “pues hombre, es que no es lo mío. Yo vivo el deporte de otra forma. La cosa es echar una mano como sea... Mira, hasta patrociné dos equipos. Pero a mí me gusta participar”
Y lo ha hecho a modo. Ha visto ascensos y descensos, nacimientos y desapariciones... “pues sí, si es que cuando estás a todas es lo que hay. ¡Pues no habré pasado resultados a la prensa de las competiciones! Incluso he escrito alguna crónica... Y usando la mopa durante los partidos.”
Luque tuvo sus momentos de gloria competitiva y no por pasar la mopa y corearse su nombre desde las gradas de las peñas, siempre cariñosamente; durante el boom del fútbol sala en los 80, ejerció de árbitro dirigiendo centenares de partidos. “Es que toda Guadalajara participaba y había muchos partidos. Alguna vez incluso arbitré fuera y no me valoraron mal . También he tenido que entrenar; no sé si me falta por hacer algo en un equipo...” Pues sí, y no sabemos si de presidente porque tampoco sería raro... pero es hombre de equipo.
Luque quedó huérfano hace años y vive soltero. No fue nunca hombre de salir mucho y su vida está hecha cerca de las canchas. “No soy mucho de salir por ahí; la verdad es que todo lo que me gusta esta relacionado con el deporte; aquí tengo mis amigos y casi mi familia; también es mi trabajo”.
Con un gesto delata un poco de cansancio. ¿Y como estás ahora; no te absorbe mucho el deporte? “Un poco cansadillo ya voy estando, sí. A veces uno piensa que ha hecho de más, pero luego miras y ves tanta gente ganando cosas, que las chicas te ganan todo... y los chicos. Y te encuentras a gente Como Chuchi Corrales que se dejan la vida también; y ves que está bien”.
Sus chicas y chicos son los equipos de Voley, deporte por el que siente especial predilección. “Y luego te cogen los de las peñas y te cantan Luque, Luque, Luque... Son gente maja. Y cuando te saludan los jugadores... A veces uno lo pasa mal pero es la vida.”
Alfonso deja caer sin querer que algo le falta, quizás después de tantos años de entrega aún le falte ese gesto concreto que aún no ha llegado.
Es hora de saber como ve Luque esta ciudad desde su prisma, el deporte; es como conoce la ciudad y a sus gentes y es un verdadero experto. “Parece mentira que una ciudad como esta haya cosechado tantos éxitos, pero no lo es. Muchísima gente viene y llena las instalaciones. Hay muchos equipos en altos niveles y muchos deportistas compitiendo porque la gente hace deporte. También estamos acostumbrados a ver torneos y competiciones de muy alto nivel. Tenemos más nivel deportivo que económico y por eso no están más alto; es complicado mantener los equipos porque la economía no lo permite y da rabia ver que pudiendo estar no están. Pero siguen luchando y los equipos están ahí. Sobre la salud deportiva de Guadalajara es muy buena”.
Cuando Luque termina su relato, un compañero le recuerda cantando el nombre de uno de esos equipos que sobrevivió gracias a los cuartos de Luque, LUQUE & FIND, lo lo lo... “Calla, calla, que casi me arruinó pero que le ibas a hacer...”
Y es que Alfonso Luque es uno de Guada, de esos que nos podemos encontrar por ahí pero nunca sólo; siempre habrá algún equipo entero con supporters incluidos cerca.
Alguien, algunos, muchos, todos algún día corearan cánticos de apoyo desde la grada Alfonso Luque... Es sólo una proyección, pero quizás sea una forma de reconocer tanta devoción a una sola causa.