El problema detectado en el paso inferior estaba localizado en los terraplenes que sustentan los estribos, debido a la existencia de agua, especialmente por la presencia del cauce del arroyo del Sotillo. El agua se infiltraba en la base de la estructura, compuesta por arcillas y, debido a la sensibilidad al agua de este material, se produjeron asentamientos que ocasionaron el desplazamiento de los estribos y del tablero, dañando diversos elementos.
Evitar entrada agua
Por ello, ha sido necesario intervenir para evitar en la mayor medida posible la entrada de agua al terraplén y a las capas superiores de cimiento. Los trabajos ejecutados han consistido en la demolición y reconstrucción de los muros de guarda de los estribos; construcción de una pantalla para protección frente al agua y de un muro de protección en el estribo norte; inyección de mortero de cemento para consolidar el terreno y evitar posibles movimientos de los estribos en el futuro; elevación del tablero para sustituir los apoyos deformados por otros nuevos, y protección de los taludes y mejora del drenaje para mejorar su estabilidad.