En este caso, a lo largo del tramo de la carretera N-320 que atraviesa la localidad se instalarán diversos elementos y marcas viales para moderar la velocidad del tráfico y, sobre todo, mejorar la seguridad de los peatones. El presupuesto de licitación de los trabajos supera los 48.000 euros y la previsión es que estén concluidos en las primeras semanas del nuevo año.
Esta actuación pretende facilitar a los conductores la percepción de los límites de velocidad establecidos y proporcionar itinerarios peatonales más seguros. Para ello, se utilizarán recursos como la señalización de una mediana de separación de los carriles en uno de los accesos a la localidad, o la utilización de franjas de pintura de alta fricción antes de los pasos de peatones. También se renovarán y ampliarán aceras en algunos puntos, al igual que la parada de autobús, y se colocarán vallados y nuevas señales.