Desde hace una semana se han realizado al menos otras tres incautaciones, en la misma zona, en las que se han requisado cerca de 1.000 kilogramos de setas y no se descartan más ya que la previsión es de una temporada de setas buena y proliferan grupos organizados para la recogida masiva en la provincia.
Para detectar estas prácticas ilegales, la Guardia Civil lleva a cabo labores de vigilancia específicas tanto en vías convencionales como en montes.